La Bella Durmiente

"De esto queremos que salga una ilustración en movimiento. No me importa cuánto tiempo lleve".
Walt Disney

Llevó nueve años... Aparentemente, el proyecto de La Bella Durmiente comenzó en 1950, pero se presentó al público casi una década después, presumiblemente debido a otros proyectos de Walt Disney que consumieron mucho tiempo como Disneyland o programas de televisión, pero también debido a los problemas para encontrar una voz adecuada para Aurora, razón por la que casi archivan el proyecto hasta que encontraron a Mary Costa, el alto nivel de complejidad técnica que presentaba la película y una voluntad determinada de dotar a La bella durmiente de una estética de cuento de hadas de la baja Edad Media.

La trama de Disney tuvo que ser adaptada y comienza con el bautizo de una niña llamada Aurora, como en el ballet de Tchaikovsky. Ese mismo día, la princesita ve cambiar su destino cuando Maléfica, que no ha sido invitada a la fiesta, la maldice para que en su decimosexto cumpleaños, Aurora se pinche el dedo con el huso de una rueca y muera. Afortunadamente a Merryweather, una de las tres hadas madrinas le queda una bendición y puede cambiar la muerte por un sueño profundo y la posibilidad de ser despertada por un beso de amor verdadero. Todo eso da como resultado una orden real para quemar todos los husos en el reino y la entrega de la princesa bebé a sus "tías" hadas madrinas para que la escondan y la críen en una cabaña en el bosque, bajo el nombre de Briar Rose como en la versión de los hermanos Grimm, hasta su cumpleaños número 16. Pero los esfuerzos por protegerla fracasan y finalmente se pincha el dedo con una rueca olvidada no sin antes haberse enamorado del Príncipe Felipe quien deshace el maleficio besando a Aurora liberándola de su profundo sueño y acortando en un día los 100 años que transcurren en el cuento de Perrault... A partir de ahí... vivieron felices para siempre.

Eyvind Earl fue el encargado de recrear este mundo prerrenacentista para el que se inspiró en el libro iluminado de 1412 Les Très Riches Heures de Jean, Duc de Berri de los hermanos Limbourgh, un gran punto de partida pero realmente difícil de adaptar al "plano" estilo americano de los dibujos animados de la época que, a su vez, se inspiraron en los artistas de vanguardia del siglo XX.

Parece que encajar todas las piezas en el rompecabezas que era la película se convirtió en una odisea, desde la adaptación de la música del ballet de Tchaikovsky hasta la animación de personajes que hizo que Disney creara equipos de animadores que dibujaban a partir de un modelo de acción real lo más rápido que podían en un formato más grande para los requisitos de una nueva proporción, el Super Technirama 70.

No hace falta decir que el presupuesto inicial fue ampliamente superado y Disney tardó años en obtener beneficios de la película luego de una no tan buena acogida por parte de crítica y público pero, con los años, La Bella Durmiente se convirtió en un ícono y, eventualmente, otra estrella nacería dentro de la película, Maléfica...