La Bestia

La Bestia

"¿Tú crees que te podrías dejar barba?"

Glen Keane tuvo uno de sus mejores momentos animando a La Bestia pero, por lo visto, hubiera deseado que La Bestia hubiera seguido siendo La Bestia. Como esto no pudo ser Keane propuso que Bella dijera la frase de la barba al final de la película y, aunque quizás hubiera sido demasiado para niños, le hubiera dado a la película un toque picante.

La Bella y La Bestia habían estado en el radar de Disney desde hacía ya algún tiempo pero, aparentemente, era una historia difícil de adaptar como años más tarde diría Joe Grant, uno de los hombres fuertes de Disney.

Para empezar, el equipo se fue al Valle del Loira en Francia y se rodeó de escenarios de cuento de hadas para tomar inspiración de sus pueblos y castillos, siendo el elegido como hogar de la Bestia el castillo de Chambord.

Para La Bestia Glen Keane se documentó en el zoo y estudió varios animales teniendo siempre en cuenta las ilustraciones del cuento del siglo XIX para saber que hacer y que no hacer. La Bestia nació como resultado de las energías y estéticas de todos aquellos animales salvajes con ojos humanos pero con cejas de gorila que reflejaran cuán atormentada estaba su alma y con melena de león, patas y cola de lobo, cuernos de jabalí, cuerpo de oso y... ¿realmente lo dibujaron con culo arcoiris de mandril?!?

"La Bestia tiene culo de arcoiris pero solo lo sabe Bella"
Glen Keane, animador de La Bestia

Al final valió la pena el esfuerzo, la oscarizada película musical cautivó a niños y mayores y todavía sigue haciéndolo.

Y no sería justo acabar son una merecida mención a Howard Elliott Ashman "el hombre que le dió la voz a una sirena y a la Bestia su alma". Él tejió la historia para siempre a través de sus canciones siendo un pilar fundamental en esta película y en algunas otras. Por desgracia murió de SIDA después de La Bella y La Bestia pero al menos se fue sabiendo el enorme éxito de la película en la que tanto esfuerzo había puesto y probablemente presagiando que sus canciones durarían para siempre.

by The Barbiest 

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