Benetton Fórmula 1 para Ken

En 1991 Barbie y Bennetton se juntaron para crear una línea memorable en la que no podía faltar un traje de su escudería de F1 para Ken con sus etiquetas estampadas imitando las de los patrocinadores pero con el nombre o las siglas de Benetton en ellas en vez de las firmas que lucían los pilotos en las carreras.

Aquellos que empezaron comprando una tricotosa a peso y haciendo jerséis de colores habían creado un imperio lo suficientemente rico para patrocinar una escudería y posteriormente comprarla.

Patrocinaron a Tyrrell, Alfa Romeo y a Toleman, la cuál compraron en 1985 y entre sus filas contaron con pilotos tan prestigiosos como Johnny Herbert o Michael Schumacher responsable de casi todas las victorias de Benetton entre finales de los 80 y principios de los 90 y directivos como Flavio Briatore.

Con el cambio de milenio el equipo fue vendido a Renault, quizás otra señal más de que el periodo de esplendor noventero de Benetton había acabado pero con su colorida ropa, su canto a la diversidad y sus polémicas campañas publicitarias con Oliviero Toscani a la cabeza convirtieron la firma en un icono de la época y Mattel inmortalizó ese momento en su línea Barbie diseñada por Kitty Black Perkins y el equipo de diseño de Benetton en Milán.

Los modelos de la línea Barbie, a parte del traje de F1  no inmortalizaban ningún diseño en concreto de la firma, más bien se centraron en que el espíritu de Benetton quedara plasmado en sus muñecas durante dos líneas. De este modo no podía faltar diversidad entre sus filas que contaron con Christie, Teresa, Kira y Ken además de Barbie, por supuesto, que en las dos líneas llevaba un suéter amarillo. ¿Podría ser este suéter amarillo un guiño al que lo empezó todo?

"Mi hermana Giuliana hacía suéteres para una tienda en nuestra zona. Un día, me dio un suéter de un color amarillo muy brillante. Bueno, todos lo querían. Estaban cansados de los colores tristes y aburridos de la época. Así que dije : Vamos a intentarlo, Giuliana tú creas y yo vendo. Compramos una vieja máquina que hacía los puntos de las medias, nos la vendieron al peso del hierro. La transformamos y desde entonces, nadie nos ha detenido. "
Luciano Benetton

by The Barbiest